Un artículo de The World Economic Forum explica que en películas de Disney, creadas entre 1989 y 1999, los personajes masculinos tienen tres veces más diálogo que los femeninos, como es el caso de La Sirenita, La Bella y la Bestia o Pocahontas. En las últimas películas protagonizadas por mujeres, como Frozen, las mujeres sí tienen más diálogo, pero los mensajes que transmiten siguen los estereotipos más convencionales de Disney.